La iniciativa es la cualidad que nos permite manejar situaciones y encarar dificultades. Sin embargo, asumir la responsabilidad de lo que está ocurriendo y tener la determinación de ponerse en movimiento enfocándonos en el camino que debemos recorrer, no suele ser algo sencillo.
En qué consiste tener iniciativa
La capacidad de tomar decisiones tiene que ver con asumir riesgos y saber buscar alternativas anticipándose a los problemas que surgen a diario y a los retos que presenta el futuro.
Sobre todo debemos ser conscientes que tomar la iniciativa es comprometerse con los resultados que queremos alcanzar. La iniciativa con compromiso nos permite tener más control sobre nuestras vidas lo que se traduce en tener la sensación de que vivimos mejor.
A pesar de todo lo anterior hay veces que las circunstancias aparecen tan amenazadoras que nos bloqueamos. En este sentido debemos percibir este miedo como una oportunidad de crecimiento, pues, aunque no siempre tomemos las decisiones más correctas, al menos seremos los protagonistas de nuestras vidas y podremos usar los errores para aprender, ya que el riesgo es algo inherente a la vida.
La iniciativa y el empleo
La iniciativa profesional es la capacidad para proponer, desarrollar o idear proyectos propios o, cuando esto no es posible, implicarse en ellos de tal manera que los hagamos nuestros.
Los comportamientos que desarrollan las personas con iniciativa en el ámbito laboral suelen ser tres:
- Dedicación. Son personas que tienen tiempo para hacer las cosas. Si no tenemos tiempo de implicarnos en una iniciativa no habrá cambios.
- Inspiración. Son individuos informados y tienen una opinión argumentada de las cosas.
- Acción. Estas personas no eluden responsabilidades y se ponen a trabajar.
Otros aspectos de la iniciativa
La curiosidad y la pasión son los principios inspiradores de una persona proactiva.
Si identificamos bien nuestro objetivo siempre será más fácil acertar, aunque es normal que surjan dudas.
Además hay que hacerse conscientes de que cuando uno toma una decisión siempre hay consecuencias que debemos asumir, por lo que es útil usar la creatividad y generar un plan B como principio de seguridad. Nada es tan fácil como parece al principio y cualquier solución suele entrañar nuevas dificultades.
Beneficios de tener iniciativa
Cuando actuamos con proactividad aprendemos a:
- encarar dificultades
- detectar nuevas alternativas
- adelantarnos a los problemas
- manejar las situaciones
- ser más sociables
Todo lo anterior justifica que la iniciativa sea una de las competencias más valoradas por las empresas. Como cualquier proceso de mejora, aumentar esta competencia laboral requiere primero que reconozcamos este aspecto como un área de mejora y después que nos pongamos a trabajarla desarrollando los comportamientos que lleva implícitos.
Recuerda que en IMFE organizamos formación para el desarrollo de esta competencia que cada vez es más demandada por las empresas y en la que te puedes inscribir.
Seguiremos hablando de competencias, y ya sabes, a tu disposición en imfemalaga.eu y malagaempleo.com
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